Las actividades desarrolladas en este tipo de taller proporcionan un envejecimiento activo mediante la estimulación cognitiva y mejoran la psico-motricidad.
La elaboración de trabajos manuales requiere ejercitar las manos, por lo que a nivel físico las personas mayores mejoran la elasticidad y la movilidad de sus manos. Además, estas actividades fomentan la socialización entre los mayores y refuerzan la autoestima.